1- Aprender a comer
• Elimina refrescos (incluyendo los light).
• Incorpora más hojas verdes a tus comidas (acelgas, espinacas, berzas y
quelites).
• Reduce las comidas procesadas (sobre todo las que tengan
conservadores, colorantes y saborizantes artificiales).
• Incrementa la ingesta de antioxidantes (frutos rojos).
• Reduce la cantidad de azúcar (no más de 25g al día).
• Incrementa la cantidad Omega 3 en tus comidas (chía, linaza, cáñamo,
aceite de pescado, trucha y salmón salvaje -no de granja-).
• Incrementa tu actividad física (empieza con 20 minutos cada tercer día).
• Y sobre todo, lee las etiquetas y sus porciones.
2- Define un objetivo
Que sea claro y con el que estés satisfecho.
3- Haz cambios de hábitos
Lo bueno toma tiempo. Los pequeños cambios, además de que son más
sencillos de realizar, te permiten dar un paso atrás si algo no funciona sin tener
que volver a empezar de nuevo.
Por ejemplo, si toda la vida has cenado pan dulce y tu objetivo es dejarlo, es
3difícil que lo logres en una semana. Haz un plan donde vayas reduciendo tu
consumo de pan dulce y termines sustituyéndolo por una cena más nutritiva.
Tal vez las primeras semanas puedas sustituirlo con un pan Ezekiel y crema de
almendras, las siguientes con pan Ezekiel aguacate y jitomate, y quizá las
últimas con una ensalada de kale con nuez de la India y yogurt griego.
4- Toma medio litro de agua al despertar
Uno de los principales objetivos de dormir es desintoxicar el organismo,
ayúdale a eliminar las toxinas de tu cuerpo. Además ¿Cuántas veces comes
cuándo tienes sed? Te va a ayudar a evitar comer de más.
5- Deja el azúcar
Desintoxicarse del azúcar es difícil, al cerebro le encanta. Aunque es esencial
para vivir, la podemos tomar de tantos alimentos que ni siquiera es necesario
consumir azúcar como tal de forma aislada. Para esos antojos de algo dulce,
ten a la mano zanahorias, su alto contenido en fibra, va hacer que te sientas
satisfecho y te pueden ayudar a
quitar el hambre por ansiedad.
Si sigues con el antojo de algo dulce, te recomiendo té de hoja de stevia.
Infusiona un puño de hojas de stevia y tendrás un té súper dulce, cero calórico
y que no va a afectar tus niveles de azúcar.
Si aún después de las zanahorias y el té de stevia tienes ganas de azúcar, se
recomienda comer una PEQUEÑA porción de ese pastel, pan dulce, o galleta
de la que tanto tienes antojo. Así te quitas la tentación y evitas el exceso más
tarde.
Esperamos que nuestros consejos te ayuden y puedas tener un año más
saludable.
Siempre es positivo leer estos consejos para descansar mejor, los pondré en práctica porque tanto trabajo me está pasando factura
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